No más...

Increíble pensar que he llegado tan bajo. Recurro a ti con la esperanza de que me puedas ayudar a resolverlo todo, a olvidarlo todo, de que me ayudes a descansar. Estoy cansado, muy cansado. Sin saber bien ni la hora ni el día en el que estoy, me encuentro solo y sin más alternativas. Durante toda mi vida rechace pedirte ayuda, lo rechace e incite a muchos a mi alrededor a que no lo hagan. Y ahora… estoy aquí, a tu lado, rogándote de rodillas que por favor me ayudes, que me ayudes a darle un fin a todo esto.

Las horas pasan, cada vez se hace más tarde. Cada segundo que se va en el vacío me duele demasiado sin ella, sin tenerla conmigo. Cada segundo. Tortura, dolor, miedo. No puedo seguir así. Simplemente ya no puedo. Lo trate todo, eso es más que seguro. Hice todo lo que pude hacer y ahora me enfrento a la cruda verdad: A pesar de haberlo negado durante toda mi vida, lo último que me queda es tu ayuda. Siento en el alma tener que tomar esta decisión, pero no podría continuar un segundo más así, viviendo sin vivir, respirando sin aire, siendo sin ser nada. Ya no puedo. Simplemente, no puedo más.

Es por eso que ahora recurro a ti. Darle un fin a todos estos problemas, poderlos olvidar y ser capaz de descansar, eso es lo único que te pido. Nada más, nada más. Mi ahora siempre fiel revólver, mi última jugada, mi recurso final, se que con aquella solitaria bala dentro tuyo serás capaz de lograrlo. Estoy cansado, muy cansado.

Te ofrezco...

No te ofrezco solo unas horas o una cosa del momento,
un solo es esto y ahí quedará.
Te ofrezco un por siempre, un infinito,
una eternidad, un para siempre, un hasta el final.

No te ofrezco visitas obligadas, salidas vacías,
cartas sin sentimiento, puras mentiras.
Te ofrezco mi alma, mi vida, mi completo ser,
cada segundo de mis días, todo mi querer.

No te ofrezco un triste te adoro ni un falso te quiero,
un frío beso, y luego de eso, nada más.
Te ofrezco un te amo desde el fondo de mi alma,
el te amo más sincero que se haya dicho jamás.

Y digo...

No se como es que me atrevía
ha decir que poesía yo escribía
cuando en esa época no te conocía
como te conozco ahora a tí.

Como es que podía decir
que mis versos eran inspirados
cuando no sabía lo que era estar a tu lado
ni lo que es el amor que me haces sentir

Porque le diste a mi alma de triste poeta
la razón para decir que su vida estaba completa
la inspiración para todas sus poesías
un verdadero sentido para vivir

Porque eres lo mejor que ha pasado en mi vida
el remedio para todas mis agonías
la más grande mis alegrías
El todo de todo mi existir

Solo eso...

Dedícame una última mirada,
Dame una razón más para vivir,
Dime al oído que aun me amas,
Dejame abrazarte y tu corazón sentir.

Completa mi vida con tu presencia,
Dibuja en mi alma una rosa color carmesí,
Escribe en mi mente miles de poemas,
Júrame que nunca te alejarás de mí.

Respira del mismo aire que yo respiro,
Sujetame fuerte y comparte tu calor,
Quedate conmigo pase lo que pase,
Enseñame lo que significa el verdadero amor.

Aquellas...

Aquellas calles que juntos recorrimos
Aquellos senderos de destino desconocido
Aquellos caminos hace años andados
Aquellos días que fueron olvidados

Aquellas tardes soleadas de otoño
Aquellas graciosas sonrisas de ternura
Aquellos labios tan familiares pero tan extraños
Aquellos besos furtivos bajo la luna

Aquellos días de incontrolable alegría
Aquellos minutos de insufrible agonía
Aquellas palabras traicioneras que aniquilan
Aquellas lágrimas brillantes en tus mejillas
Aquel momento en que dejaste de ser mía…

Lo último...

Y por si nunca nos volvemos a ver,
ahora dejo esto escrito.

Por si no nos volvemos a hablar,
al menos estó hará de quedar.

Una carta, un poema, unos tristes versos,
Un corazón, una vida, una lágrima, un vacio inmenso.

Que quede todo escrito, que todo no se pierda jamás.
Que tu nunca, nunca olvides, que yo nunca te deje de amar.

Que todos sepan que lo hice,
Que lo hice y nunca lo deje de hacer.

Que todo el mundo lo sepa por siempre,
porque yo tambien, por siempre te amaré.

Gracias...

Gracias por darme una sonrisa, por llenarme el corazón
por darme alegría, darme una razón
por darme extrema perfección, por cada latir
gracias, completamente sinceras, gracias por existir.

Gracias por cada lágrima, por cada engaño
por cada tristeza, por cada temor
gracias por cada mentira, por tu indiferencia
gracias, tristemente sinceras, gracias por el dolor.

Gracias por todo lo que me has dado,
gracias por haber estado ahí,
gracias por ser como eres,
gracias, dolorosamente sinceras, por darme una razon para morir.